viernes, 27 de mayo de 2016

¿Qué podemos creernos?



No es fácil obtener información fiable sobre las cosas que nos afectan pero, en la medida en la que debemos actuar y tomar decisiones, necesitamos creer en algo. Todos nuestros actos y decisiones se basan en algún tipo de información o de creencia. Para poder actuar, debemos aceptar como cierta alguna premisa, aunque sea de forma temporal y sujeta a prueba. Y debemos actuar a diario.


Estamos llenos de dudas, pero hay que tomar decisiones de todas formas



¿Por qué la información no suele ser demasiado fiable?


Por exceso de información, debido a las nuevas tecnologías de la información, y debido a la propaganda a la que estamos sometidos. 

Internet nos ha permitido publicar cualquier tipo de información y ponerla a disposición de cualquiera con acceso a la red. Una enorme cantidad de información está a nuestra disposición ahora mismo, incluyendo esta entrada. No suena del todo mal, pero es muy difícil (por no decir imposible) poder buscar y revisar la información que más nos convenga. Con una búsqueda en nuestro navegador, podemos encontrar miles o millones de referencias sobre nuestra búsqueda. 

Además, la gente que nos ofrece información suele estar muy interesada en hacernos creer aquello que les interesa a ellos, pero no necesariamente a nosotros. Así, las empresas están interesadas en vender sus productos, pero no tan interesadas en que compremos en producto adecuado para nosotros. Y los políticos están más interesados en nuestro voto que en aquello que nos conviene. 

¿Podemos creerlos, si sospechamos que no les interesa ofrecernos la información que más nos conviene?




¿Y qué podemos hacer?


A pesar de todo, necesitamos creernos algo para poder tomar decisiones. Necesitamos adquirir cosas, elegir estudios o ver qué hacer con nuestros ahorros. Podemos tener la información adecuada o no, per algo tendremos que hacer. 

Probablemente, no estaremos completamente seguros de la información de la que disponemos para tomar estas decisiones. No estamos seguros de la calidad del producto que nos venden, no estamos seguros de si esos estudios son los más adecuados o no estamos seguros de si esa inversión será rentable. 

Probablemente, el vendedor nos quiere vender ese producto de todos modos, la universidad quiere que estudies allí de todos modos y el banco quiere que contrates sus productos financieros, también de todos modos, aunque igual no sea lo mejor para tí. 

En estos casos, siempre podemos buscar otras alternativas, escoger la que parezca más interesante y probar. Podemos salir perdiendo o aprender algo nuevo que no sabíamos, pero no hacer nada nos condena a no ganar ni aprender nada. 

lunes, 9 de mayo de 2016

¿Es bueno tener tantos emprendedores?


El emprendedor está de moda

Emprender es un verbo de moda desde hace algunos años. Durante este tiempo, una de las soluciones más comentadas que se han dado para superar la falta de empleo debido a la crisis ha sido el emprendimiento.

Según se comenta, el emprendimiento permite crear activitades económicas y empleos nuevos ahí donde las empresas tradicionales y la administración publica no llegan. En lugar de ser empleados reactivos que ocupan un puesto de trabajo creado por alguien, los emprendedores se mueven buscando oportunidades de crear algún valor añadido que hasta ahora nadie hacía. Este nuevo valor añadido estimula la innovación, la creación de conocimiento y tecnologia que hacen que la economía de un país se regenere permanentemente y mantenga o mejore su competitividad. 

Como estandarte de está moda encontramos las jóvenes empresas del sector tecnológico, empresas que surgieron de la nada hace pocos años y hoy están muy presentes en nuestras vidas. Ahí tenemos las Google, Facebook, Apple, Amazon y un largo etcétera. 

Sede de Google en Silicon Valley. Quizá hayas llegado a esta página usando este famoso buscador

Más emprendedores, más pobres

El emprendimiento está bién por las razones anteriormente expuestas, pero nuestro problema es pensar que puede solucionar nuestros problemas de desempleo, de deuda pública y privada y de devaluación salarial. El emprendimiento debe ser vocacional, y no una solución desesperada para salir de una situación de desempleo. 

Un dato interesante. Los países más prósperos tienen menor porcentaje de población emprendedora, mientras que los païses menos prósperos tienen un mayor porcentaje. El país de Google, los Estados Unidos, tienen un 7,5% de emprendedores, mientras que en Bangladesh, país famoso por las miserables condiciones de trabajo de los trabajadores del textil, tiene el 75%. 

Este 7,5% de emprendedores americanos no deja de ser curioso, ya que podriamos pensar que allí, quien más quien menos, es fundador de una start-up.

Que emprenda quien tenga un sueño, no una necesidad

Creo mucho en el emprendimiento. Emprender nos puede permitir ser más proactivos y hacer cosas más acordes con nuestros intereses y con nuestro talento. También creo que es un mundo menos discriminatorio, porque lo que importa es el producto o servicio creado, y no tanto las características personales del emprendedor, como la edad, nacionalidad o color de piel, el tipo de cosas que pueden pesar en el mercado laboral. 

No obstante, creo que el emprendimiento sólo traerá prosperidad a un país si, aquellos que emprenden, lo hacen motivados por el sueño de tirar adelante un proyecto personal, que detecte una necesidad lantente y que aporte una mejora a la sociedad. 

No traerá prosperidad si mucha gente emprende como única forma de ganarse la vida, generalmente agotando todos sus ahorros y ofreciendo productos y servicios ya saturados de oferta.